Un chocolate, un café o una revista P&M, este kiosco ya no es una cabina metálica cerrada sino una estación abierta para el encuentro
Por Ángel Ricardo Gómez
Fotos cortesía La Parada
En la actualidad, los kioscos –al menos en Caracas– pueden ofrecer desde queso llanero, pasando por cepillos de dientes o productos de cuidado personal, hasta cargadores de teléfonos móviles.
En 2003 surgió la idea de La Parada Inteligente tratando de ubicarse en un punto medio entre el concepto original del kiosco que sólo vendía periódicos y el actual modelo tipo quincalla. Aquella cabina metálica se convirtió en estación abierta donde todos los productos están a la vista y el famoso kiosquero ya no está encerrado sino más cerca del cliente.
Tras dos décadas de éxito y expansión, la franquicia fue adquirida en 2021 por Patricia Weil y Luis Jorge Salazar, directores, quienes asumieron el reto de relanzar la marca, golpeada, como muchos sectores, por la pandemia, entre otros aspectos. Luego de un rebranding, ahora se conoce como La Parada.
Después de sincerar los 80 kioscos que adquirieron con base en su ubicación y resultados económicos, actualmente tienen cerca de 60, entre establecimientos propios y de franquiciados, y han dado el paso a La Parada Corporativa, que lleva el kiosco al interior de las empresas.
Weil explicó que si bien hay puntos muy exitosos desde siempre como Metro Center de Capitolio o Parque Humboldt, la experiencia dentro de las empresas ha sido diferente y con muy buena receptividad. “Es un consumo distinto porque tienes a tu público cautivo ahí. Ha sido muy positivo para los empleados porque ya no tienen que salir de su oficina”, comentó la directora.
La Parada ya está en la sede de empresas como Grupo Leti, Coca Cola, Simple TV, Parmalat y Banco Provincial, entre otras.
El número es clave
Al preguntarle su opinión sobre las 74 marcas activas que arroja el más reciente censo de Profranquicias, Weil se mostró optimista y comentó: “Para ser el primer censo ya tenemos un número, y eso es importante. Pero estoy convencida de que hay muchísimas más”.
Entre los retos que ha tenido que sortear desde 2021, destaca el alto costo de los alquileres en los centros comerciales, pues los márgenes de ganancia no se corresponden con los cánones de arrendamiento.
¿Por qué seguir apostando a Venezuela? Y la vocera respondió: “En primer lugar, porque somos los protagonistas. ¿Qué tiene Venezuela? Que nosotros levantamos un teléfono y siempre vamos a conseguir ayuda, que no somos un inversionista que viene a este país a ver cómo le va. Y en Venezuela hay mucho por hacer”.
