Hace dos décadas surgió una empresa que brinda soluciones asistenciales y tecnológicas a las principales aseguradoras del país
Por Ángel Ricardo Gómez
Fotos Iván Fraga
Mar abierto. Las olas aún no son las que el surfista espera. Pero con el paso de las horas, cambia la velocidad del viento. La marea sube. El oleaje aumenta y su fuerza hace que rompa en lugares insospechados.
El surfista aguarda con su tabla. Sólo la incertidumbre lo acompaña en medio de los azules: es el hombre en silencio frente a la naturaleza, inmensa, impredecible.
Hay mucho de insolencia quizás. Un insignificante ser humano enfrentado al rugir de aquella garganta que parece tomar gárgaras de agua salada y escupirlas en la arena de la playa.
Andrés Simón González-Silén practica surf y probablemente de allí ha aprendido sobre el manejo de la adrenalina y la incertidumbre, sobre la resiliencia que se requiere para levantarse cada vez que una ola lo arrastra, sobre la valentía necesaria para crear y emprender en medio del caos.
Si a eso se suman su especialidad en medicina y gerencia, y sus ganas de servir a la gente, el resultado es una iniciativa empresarial en el sector salud preparada para sortear distintos tipos de marea.
A tierra… ¿firme?
En 2010 González se enfrenta a la pregunta de su vida: ser médico de consultorio/quirófano o ser empresario en el sector salud.
Ya era un profesional en medicina general y la justificación racional que encontró para su decisión fue: “haré un posgrado en una especialidad que no existe”. En lugar de atender a un paciente a la vez, podría llegar hasta una cifra superior a los 30 mil pacientes por mes, prestando servicios médicos primarios y domiciliarios a empresas de seguros.
A través de Venemergencia, creada en 2004 junto a su colega Luis Enrique Velásquez, apuntaba al propósito de hoy en día: “Darle más y mejor acceso a la salud a los venezolanos, acercando los servicios de manera oportuna e invirtiendo para continuar la transformación del sistema en Venezuela”.
Todo comenzó con una pasión, un hobby que se convirtió en un propósito. González y Velásquez se conocen en la Universidad Central de Venezuela y comienzan a hacer guardias voluntarias en el hospital Vargas. La sala de emergencias de este centro de salud caraqueño los puso en contacto con la realidad del sistema sanitario venezolano y también con la cultura de los pacientes. Estas conductas los impulsaron a impartir cursos de primeros auxilios que permitieran a las personas diferenciar lo que es una urgencia de una emergencia, y obtener herramientas para atender unas y otras.
Inteligencia, tabla de salvación
De los cursos a los kits de primeros auxilios, de allí a los servicios que llevaban la medicina a las personas, adquisición de ambulancias, luego grúas, el surgimiento de la Fundación Venemergencia, para sostener los cursos –ahora con aval universitario– y la intervención de lo público desde lo privado con la creación de las zonas cardioprotegidas, y los desfibriladores que se vienen instalando en distintos espacios de la ciudad. A esto se suman los Urgent Care, salas de urgencias, que vienen a robustecer el sistema de atención médica de la empresa, pues cierran un ciclo de servicios prehospitalarios destinados a evitar las visitas innecesarias a clínicas y hospitales. El sistema incluye la orientación médica telefónica o telemedicina y la atención médica domiciliaria.
“Yo creo que hay mucho más capital buscando ideas buenas que ideas buenas disponibles para el capital. ¿A qué me refiero? Si tú me preguntas cuáles son las claves que hemos aprendido nosotros en el emprendimiento, la más importante es levantarte más temprano y acostarte más tarde. Es infalible el trabajo”, comentó Andrés Simón González-Silén, quien agregó a las claves del éxito, desarrollar ideas para el colectivo, no para un individuo, “pensar en las necesidades de la gente”.
Por otro lado, apunta al equipo, “nada extraordinario se hace solo”.
La Cámara Venezolana de Aseguradoras calcula que apenas 5% de la población está asegurada y en el sector salud, González estima que alcanza a 2%. En este porcentaje, Venemergencia lidera con 80% de participación en el mercado, es decir, que presta servicios a las principales aseguradoras del país. “El futuro es llegar a más gente, contar con más infraestructura y más tecnología”, concluyó.
La tarde cae. El azul sucumbe a los tonos cálidos que preceden a la noche. El surfista contempla y aprende que el balance es necesario en las olas y en la arena.