Cuando la banca y la música se encuentran…
Ignacio Salvatierra Palacios se sentía incompleto. Tenía años cosechando una exitosa carrera como banquero, pero algo le faltaba: la música. De pequeño soñaba con ser pianista, como su mamá, pero prefirió seguir los pasos de su padre, y escogió las finanzas. Y aunque desde la banca apoyaba proyectos culturales, sentía que no era suficiente para satisfacer su anhelo de estar cerca de la música. Así que un día, después de más de cuarenta años como banquero, decidió estudiar piano y cumplir ese sueño que lo había acompañado desde niño.
Para su sorpresa, resultó tener madera para la música. Una cosa llevó a la otra y, cuando se dio cuenta, ya estaba componiendo, produciendo y viviendo de su nueva pasión. Esto compartió con la Revista P&M
¿Qué tienen en común la banca y la música?
Depende de la perspectiva. Intrínsecamente, nada tiene que ver entre ellas, pero, para mí, ambas son actividades creativas que buscan conectar con la gente. La banca, creando productos y servicios que sirvan y apoyen al cliente y a la sociedad; y la música, agradando, sanando, animando, tranquilizando y motivando; generando una comunicación sincera de historias y sentimientos. En definitiva, ambas son comunicación y bienestar para la humanidad.
Si tuviera que escoger entre una y la otra, ¿cuál sería?
Las dos. Siempre anhelé ser banquero, como mi padre, y tocar el piano, como mi madre. Aunque lo hice en momentos distintos de mi vida, con ambas me he sentido personalmente realizado y feliz.
¿Qué es lo próximo que viene en su carrera musical?
Tengo dos nuevos álbumes musicales que saldrán al público este año. Por un lado, un CD con canciones en el ritmo de onda nueva, para honrar la memoria del maestro Aldemaro Romero y su legado musical. El otro será mi tercer álbum de música instrumental, con el piano como pieza central.
¿Un género musical?
El bolero.
¿Un principio inquebrantable?
Honestidad.
¿Una ciudad?
Caracas.
¿Un hecho vergonzoso imposible de olvidar?
La traición.
¿Una bebida?
El agua.
¿Un aroma?
Lavanda.
¿Algo de lo que se arrepienta?
Las veces que no logré priorizar mi tiempo equilibradamente.
¿Un sueño por cumplir?
Ganar un Grammy.
¿Algún talento oculto?
Uno nunca sabe. Vamos a ver.
¿Cuál es la clave del éxito?
La curiosidad por aprender siempre cosas nuevas. El sentido de urgencia para aprovechar el tiempo y los momentos. Darlo todo en todo, hacerlo siempre bien y apuntar a la excelencia siempre y en todo.